Uno de cada cuatro españoles no tiene trabajo, su saldo bancario en este invierno adelantado tirita, las medicinas se pagan doble, por encima de fórmulas partidistas estos días parecen noches, estas noches parecen murciélagos. El país es una fotocopia triste del Purgatorio, una imagen recién impresa: cero quejas, cero manifestaciones, cero cobertura social. Los gobernantes prefieren que nadie se rebele, que nadie patalee, que todo se acepte a cabeza gacha, como contribuyentes amaestrados, aves de corral, servidas en la cazuela de los Mercados.
El principio de Arquímedes moderno indica que cuánto mayor es el volumen sumergido de su estafa –léase Rescate– mayor es el bienestar desbordado de la ciudadanía –léase Pobreza. Existe una Mass-Media de analfabestias, que todavía se asombran cuando ven a alguien saltar desde el séptimo piso. Son televidentes que sortean la Crisis porque ya tienen un smartphone, que piensan que los Indignados son otro quijote de la justicia social, que el país, la sanidad o la escuela son sinónimos de business. El Liberalismo y la Independencia tienen por patria un cajero.
Contra el establishment financiero nadie puede. Obama –que parece un guitarrista de jazz– lo intentó y Clinton –que es el saxofonista del grupo de Obama– también lo intentó, pero poco. Nadie se atreve contra los Rothschild, los Morgan o los Walker. El FMinternacional y el Bmundial saben que España es una Marca maravillosa, pero ciudadanos como nosotros la estropeamos.
Políticos y twitteros lo único que estiman de la Democracia es el acto de Votar, que es algo así como la encuesta del empleado o el Rasca&Gana, una vez se realiza se valora la participación, luego el resultado es lo de menos… siga probando: hay miles de buenos políticos y managers por descubrir. Hay ciudadanos virtuales de la Democracia 2.0, una versión que salió rancia, con mucho parche y ya no aguanta más. Si al leer esto –lector– no estás indignado, es señal de que eres parte del problema.
Manifiéstate no robes, Manifiéstate no estafes, Manifiéstate no seas flojo. Podéis ser pobres, honrados o timados, pero no seáis huevones. Manifiéstate, al menos, si no eres capaz de rebelarte. El 14N ponte los bluejeans, sácate la corbata y despierta de una vez, el verdadero pulso de la Democracia corre por tus venas. Manifiéstate contra la anemia de la Clase Política, Manifiéstate por millones de razones, por una sociedad soberana, cívica y justa.